De nuevo, muy lindo, Olga. Uno empieza a imaginar la rica cultura musical de los pájaros. Imagino a los pájaros tocando a su modo diversos instrumentos musicales: tocando con agua en la garganta, tocando en lugares del bosque con diferentes resonancias... Interpretando canciones alegres o tristes... Interpretando un acervo común de canciones que ha pasado de generación en generación... Gracias, Olga
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Ooooooh! Muy bueno, Olga! Sobre todo por la palabra "traman". Ya casi veo cuervos y buitres conjurando un réquiem...
ResponderEliminarUna pequeña maravilla, Olga.
ResponderEliminarMuy bueno Olga. Tenía yo un tuit parecido pero con las antenas de TV, pero éste le supera en poesía e intensidad.
ResponderEliminarEsta es de esas ficciones que cuantas más veces las leo, más me apetece comentarlas. Es preciosa, Olga.
ResponderEliminarGracias, Javi, Oriana, Manuel... Me alegra que les haya gustado. Besos
ResponderEliminarHermoso relato, Olga.
ResponderEliminar"el pentagrama del cableado..."
los pájaros saben más de lo que cantan.
Gracias, Olga
Cuando se posan en mal lugar, la partitura queda desafinada.
ResponderEliminarMe gustó mucho.
Pájaro que canta, su mal espanta.
ResponderEliminarDe nuevo, muy lindo, Olga. Uno empieza a imaginar la rica cultura musical de los pájaros.
ResponderEliminarImagino a los pájaros tocando a su modo diversos instrumentos musicales: tocando con agua en la garganta, tocando en lugares del bosque con diferentes resonancias...
Interpretando canciones alegres o tristes...
Interpretando un acervo común de canciones que ha pasado de generación en generación...
Gracias, Olga
Qué exquisitez, estas minis extraordinarias resisten el paso de los meses y de las múltiples lecturas. Y mejoran, como los buenos vinos.
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