La primavera ya está aquí. Y ya asoman los botones de las flores, de los árboles y de las ropas de entretiempo. Poneos cómodos, desabrochaos el botón que oprime el cuello de la imaginación y pulsad el botón de Comentarios.
Y recordad, máximo 140 caracteres o 39 palabras.
Al darse cuenta de su error, Dios presionó Ctrl + Alt + Del.
ResponderEliminarPulsando los botones correctos, verás mi felicidad florecer.
ResponderEliminarAdán no entendía por qué tenía un botón de Encendido/Apagado y no un ombligo.
ResponderEliminar¡Bienvenida, Zilniya! Un gusto enorme tenerte en Ficcionario... Aunque tú eras ya, desde hace mucho, parte de la familia. :)
Nuestras vidas ecajaron perfectamente, como botón a su ojal.
ResponderEliminarLos recuerdos de mi vida, botones de muestra.
ResponderEliminarMi blusa de primavera tiene botones de flor.
El botón del cuello de la camisa pone: PULSAR PARA MODO FORMAL.
Los botones de muestra de la primavera son las yemas de los árboles.
Gracias por dejarme ser un botón más de este vestido de minificciones. ;D
ResponderEliminarQuiero una muestra de tu promesa, algo que me asegure que lo nuestro es algo más que una ficción.
ResponderEliminarEntonces ella, sigilosa, se desabrochó el botón de su blusa, y quedó al descubierto.
¡No me presiones, primavera! Sólo me abriré si me toca el amor.
ResponderEliminarVeo con buenos ojos todos los capullos y botones del prado.
Abre con tus besos mis ojos de botón.
Apenas brota
ResponderEliminarel botón del ciruelo
y lo tiraron
El lunes serré feliz, porque comienza la semana. Pero debo esperar, esperar que sea lunes. ¿Como se espera la felicidad? todavía me falta un domingo tirado en la cama, un almuerzo de mala gana y una cena sin cubiertos. Como se duerme antes de recibir la felicidad, la ansiedad es más que una gota de lluvia cayendo a tres mil kilómetros por hora. La felicidad solo se debe esperar, quizás se retrase y el martes me sorprenda o el jueves me haga la cama para dormir en paz…
ResponderEliminarhttp://letrasconvictasyfiltradas.blogspot.com/
Explosiva
ResponderEliminarVolé por los aires al tocar el botón equivocado. Era una bomba, su camisa entreabierta.
Aumentativo
ResponderEliminarTenía un botón sobre el cuello. Se lo pisaba un militar desalmado, de enormes pies.
Pequeño altercado doméstico
ResponderEliminarEl botón de la bata cayó sobre la bota. Molesta, lo pisó.
Javier López & Oriana Pickmann
ResponderEliminarCongregación
Todas las monjas de aquel convento tenían malos hábitos. La hermana costurera era incapaz de emparejar los botones con los ojales.
Los botones de colores, corrían veloces...
ResponderEliminarMiré a la luna y vi que le caía un botón y lo cosí...
Sus ojos fijos con mirada triste, parecían dos botones brillantes queriendo encontrar el ojal a donde poder encajar su vida...
Un día de sol, me encontré un botón, me agaché a cogerlo y se apagó la luz...
Botones de las dos de la madrugada...