Estaba muy enfadado a los catorce y a los quince, en verano y en invierno, en casa y fuera de casa. Tan enfadado que su cara aparecía contraida en las fotos. La cámara formulaba una pregunta y su cara no sabía la respuesta. Y encima, el acné le hacía una reacción en cadena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Agradecemos que los comentarios se refieran a la entrada.
También puedes dejar en ellos tus minificciones o relatos.
No se publicarán URLs, ni intercambiamos enlaces.