lunes, 2 de febrero de 2009

Destiempo



Se preparó para el futuro que, cuando niño, le habían prometido. Por desgracia, cuando el futuro llegó, él ya no tenía más tiempo.

3 comentarios:

Rafael Vázquez dijo...

Fantásticos microrrelatos, Olga.
El tiempo es la pura imprevisibilidad. Los momentos se parecen a los infinitos y azarosos collages que dibujan las olas en la playa.
Tu tuit me recuerda todo esto, Olga. Cómo al final todo es imprevisible. Y rompe nuestros planes.
Gracias, Olga.

Lola C. dijo...

A mí me sugirió la pesada carga de las expectativas con que los mayores cargan a los niños, y cómo la vida después, tiene pensamiento propio.
El futuro se lo hace cada uno ayer.

Florencia Madeo Facente dijo...

Por mi parte, veo en esas palabras la pérdida del tiempo para uno mismo a medida que avanzan los años, ya que se nos sumas cargas, responsabilidades. Y eso lo digo, ignorante de que aún debo crecer muchísimo y, por tanto, soportar muchísimo.

Dejaré un tuit que se me ocurrió hace unos instantes, no tan profundo como suele gustarme escribir:

"Una amistad que no se cuida, puede ser madre de bastardos"

Saludos!.