jueves, 11 de noviembre de 2010

Errar es humano

El genio me concedió un número ilimitado de deseos. El último que le pedí fue que lo dejara todo tal y como estaba antes.

1 comentarios:

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Me parece genial. Al final corrigió sus errores ¿no?
(opinión peregrina de alguien sin ni idea)