jueves, 17 de junio de 2010

Antepasados atrevidos

Cuando éramos peces, no había timidez que nos detuviera a la hora de declararle amor a nuestra pretendida. Ella sólo podía ver burbujitas saliendo de nuestros labios.

5 comentarios:

Oriana P. S. dijo...

Qué tiernitos éramos.

Me imagino a uno diciendo "glubiu, glubiu" y al otro respondiendo "glubiutú". Además de que los pececitos tienen las boquitas listas para darse besitos :)

Me ha encantado, Javier. Un cuentito muuuuy rico.

Javier López dijo...

Jajajaja glub glub...

Zilniya dijo...

¡Ternura acuática y burbujeante! :D

Carmen María dijo...

Muy lindo, me ha encantado el desenfado de esos peces.

Javier López dijo...

Las tres sois chicas, y vuestra ternura se refleja también en vuestros comentarios.
Muchísimas gracias!!!