domingo, 4 de enero de 2009

Monstruosidades IV

Para que no tuviera miedo, la madre del pequeño monstruo le repetía, al acostarlo cada noche, que los humanos no existían.

2 comentarios:

Oriana P. S. dijo...

Buenísima toda la serie monstruosa! Pero éste me causa una ternura terrorífica, casi mutante.
Bravo!

Rafael Vázquez dijo...

Fantástica serie, Olga. Nos obliga a buscar el lado "humano" en el corazón de los monstruos. Y al descubrirlo, nos enseña a su vez el lado monstruoso de nuestro corazón.
Me gusta también porque subyace en él una estructura fractal infinita:
los humanos como monstruos que causan terror a otros monstruos que a su vez causan terror...
Gracias Olga.