lunes, 15 de diciembre de 2008

Inopia

Desconocía hasta su propia ignorancia.

2 comentarios:

Oriana P. S. dijo...

Cae en su mismo centro, en su misma esencia.
Me imagino la cara del pobre tipo, diciendo que no sabe nada de nada. ¿Será un seguidor de Sócrates? Quizá ni siquiera eso sabe...
Simplemente genial.

Lola C. dijo...

Si es que no termina uno de conocerse, eh?.
¡Otro de cinco palabras! ¡Bien!