martes, 2 de diciembre de 2008
Boomerang
A cada golpe, al niño le crecía una nueva espina. No entendió por qué hicieron tanto escándalo el día en que los atravesó con ellas.
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Minificcionario,
Olga,
Serie sobre Niños
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3 comentarios:
Claro ejemplo de defensa propia. Estremecedor.
Buena parábola de muchas cosas que acaban pinchando en la vida... y luego nos preguntamos por qué.
Genial muestra del "quien siembra recoge".
Me la llevo a mi blog...(prestada, claro)
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